Un estudio y cientos de experiencias como mamás, con el paso del tiempo han podido ofrecernos diferentes visiones que permiten ver cómo actúan nuestros peques conforme pasan los meses.
A través de la revista ‘Sciencie’ se difundió un estudio realizado por las universidades de Harvard en Estados Unidos y de Copenhague ubicada en Dinamarca, donde intentaban entender el comportamiento de los bebés entre los 8 y 16 meses de edad.
En el experimento se proyectaron dos vídeos a niños con esas edades, en las grabaciones se podían ver a dos personajes, situados en distintos extremos de la pantalla, conforme pasaba el tiempo se acercaban para enfrentarse, alguno de los dos tenía que ceder el paso para que ambos continuaran su camino.
Los investigadores se basaron en sus reacciones gestuales y corporales ante lo que veían en la televisión. Cuando vieron que el personaje más pequeño cedía el paso al mayor, todos los bebés mantenían la atención en el encuentro que duraba 12 segundos. Pero las cosas cambiaban cuando el mayor era quién dejaba pasar al pequeño, cuando eso pasaba la atención de los pequeños era más larga.
La conclusión fue que aunque son unos bebés, son capaces de ver como algo inesperado, que el personaje de menor tamaño se imponga al mayor.
“Nuestro trabajo sugiere que con una pequeña socialización, los humanos son capaces de entender estas acciones, incluso antes de comenzar a hablar”, declaró la investigadora del caso Lotta Thomsen.
¡Los bebés de 10 meses mandan!
Por supuesto, el experimento anterior sirvió para que cientos de personas se enteraran que a partir de esa edad, los niños entienden que el más grande tiene mayores posibilidades de imponerse ante otro de menor edad.
En cambio los bebés de siete meses son capaces de ponerse en el lugar de los otros y entender las decisiones de las personas. “A partir de esa edad, los niños ya atribuyen objetivos e intenciones, sin la necesidad de expresarlo con palabras”, señala la American Association for the Advancement of Science.