De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) cuatro millones de bebés mueren cada año en su primer mes de vida y aunque la Asociación Española de Pediatría (AEP) recomienda a los padres que los bebés duerman boca arriba, esto puede provocar plagiocefalia, que es una asimetría craneal y sus secuelas son estéticas como: asimetría facial o desalineación de orejas, sin embargo, existen recomendaciones para evitar la muerte súbita del lactante sin otros riesgos a su salud.
Aquí te enlistamos cómo puedes prevenir este síndrome:
- No te expongas al humo del cigarrillo, esta recomendación se extiende desde el embarazo y después del parto, nunca permitas que fumen delante de tu bebé.
- Durante los primeros seis meses de vida, es aconsejable que el bebé duerma en su cuna, en la posición boca arriba, siempre con atención de sus padres.
- No uses almohadas o cojines en la cuna del bebé, también evitar juguetes que puedan ocasionar un atragantamiento.
- El colchón de la cuna del bebé debe ser firme y siempre deben estar estiradas las sábanas que uses, una buena sugerencia es que tenga cubierta impermeable.
- Si tu bebé tiene menos de tres meses, no compartas la cama con él, tampoco si es prematuro o si te encuentras muy cansada o tomaste alguna medicina que provoque somnolencia.
- Nunca cubras su cabeza con mientras duerme ni lo abrigues demasiado.
- La temperatura ideal para tu bebé es de 18 o 20 grados centígrados, evita que la habitación del bebé sea muy alta.
- No acerques a tu bebé cerca del calefactor ni bajo una luz directa, no le pongas cobijas térmicas ni bolsas calientes.
- El chupón extiéndelo después del primer mes de vida y siempre que lo use que sea bajo tu supervisión.
- Si tu bebé presenta fiebre o malestar general, consulta a tu pediatra de inmediato.
Por otro lado, especialistas encabezados por Martin Weber han realizado una lista con los principales síntomas que se pueden presentar en un bebé para evitar la muerte súbita y que puedes reconocer los síntomas en caso de que tenga que recibir asistencia en el hospital.
- Problemas de alimentación o amamantamiento.
- Calambres.
- Movimientos sólo por estímulo.
- Jadeos con más de 60 aspiraciones por minuto.
- Depresión de la caja torácica.
- Temperatura corporal de más de 37.5 o menos de 35.5 grados Celsius.
Esta simple lista puede prevenir más del 80% que los bebés estén en una situación de riesgo de muerte súbita. Este estudio fue realizado en países en vías de desarrollo, indicaron los científicos en la revista médica británica The Lancet.