A veces cómo mamás es difícil comenzarles a enseñar nuevas cosas a nuestros pequeños, una de ellas a ir al baño, pero de acuerdo a la filosofía Montessori puedes lograrlo creando autonomía en tu pequeño.
Pero para llevar a la práctica esta filosofía, debes tomar en cuenta cuatro aspectos:
- Fomentar como padre la autonomía de tu hijo.
- Respetar y amar al niño.
- Seguir a tu hijo.
- Ofrécele un ambiente preparado y adaptado.
Consejos para que tu hijo deje el pañal:
- Edad: Debes saber que el dejar el pañal no tiene nada que ver con la edad, el momento ideal para que tu hijo deje de usarlo es cuando ya puede controlar esfínteres, depende de su nivel fisiológico.
- Ambiente: Dale a tu hijo todo lo necesario para que al utilizar el baño o su bacinica por primera vez tenga todo a la mano, como un escalón, un orinal, toallitas húmedas, con el fin de que no dependa de ti para hacer del baño, ni de lavarse las manos.
- Ropa fácil de quitar y poner: Continuando con la autonomía debes darle el control, y vestirlo con ropa cómoda para que él pueda quitarla fácilmente a la hora de ir al baño.
- Nunca obligarlo: No debes obligar a tu hijo a que defeque sino quiere, es decir no lo mantengas sentado por media hora en el baño, porque parece un castigo que funcionará erróneamente en la mente del infante
- Premios: El pequeño tiene que ver que dejar de usar pañal es un proceso normal y no conviene ni castigarlo ni premiarlo para que comience hacer del baño en su orinal, no lo premies para conseguir que haga del baño.
- Rutinas: Con el fin de que interiorice que es un hábito el hacer pipí, podemos ir recordando por momentos si necesita ir al baño a hacer sus necesidad, ya sea después de comer, antes de acostarse, no solo recordarlos sino estar presente a la hora de que suceda este proceso, sin hostigarlo o alentarlo a hacer.
- No es un reto: Ningún niño deja el pañal en 15 días o dos, cada uno vive el proceso de manera diferente y debes dejarlo que lo haga a su tiempo.
El niño está listo para dejar el pañal, cuando:
- Tiene el pañal seco en algunos cambios.
- Comienza a interesarse por el baño o esa zona.
- Te avisa que se hizo popo o pipí.
- No quiere quitarse el pañal o se niega a ponérselo.
- Interés por cuentos que hablan acerca de ir al baño.
Pero siempre tienes que tener en cuenta que es un proceso donde no debes abandonarlos, sin embargo, no deben depender de ti, por lo que debes ir preparándote para verlos convertirse en unos niños responsables de su cuerpo.