Quizá no haya decisión más complicada o dolorosa para una mujer, que la de volver al trabajo tras convertirse en mamá. Algunas prefieren tomarse un tiempo largo alejadas de su profesión, otras de plano deciden dedicarse de lleno a los hijos, pero muchas tienen la necesidad de volver a trabajar para mantener a su familia o aportar algo de dinero al hogar.
Es por eso que te damos 3 tips basicos para que ese regreso al trabajo sea lo más satisfactorio posible.
- No te sientas culpable. Al final haces algo para que ellos estén mejor y darles un buen nivel de vida, así que en la medida de los posible, alégrate porque con tu trabajo ellos estarán bien. Si trabajas con culpa, al final no disfrutarás ni de lo que haces, ni de la crianza de los hijos.
- Pide ayuda. Nadie puede hacer todo por sí misma. No te eches miles de responsabilidades encima porque al final, acabarás haciéndolas todas mal. Acepta que no puedes con todo y si tu esposo, mamá, alguna amiga de confianza, familiar o hasta una niñera pueden ayudarte, no te apenes en solicitarles ese apoyo extra.
- Sé amable contigo. Es probable que pienses: “todo el mundo me juzga y me critica”. Seguro algunos lo hacen, pero la mayoría no. Mejor enfócate en quererte y hasta darte el gusto de hacer cosas que te agraden: toma un café con las amigas, ve de compras, da una caminata larga. Hay pequeñas acciones que te ayudarán a vivir tu etapa laboral y sentirte bien mientras lo haces.
Al final, tus hijos comprenderán que mamá debe trabajar y mientras el tiempo que les dediques sea de calidad, entonces ellos crecerán amándote y apreciando tu esfuerzo.
