Un nuevo estudio publicado en la revista Molecular Psychiatry confirma un vínculo entre las fiebres durante el embarazo y el riesgo de autismo.
La investigación, de los médicos, siguió cerca a más de 100 mil niños nacidos en Noruega entre 1999 y 2009. Las mujeres que experimentaron fiebres durante el embarazo eran más propensas a tener niños diagnosticados con autismo. El riesgo fue mayor para las mujeres con fiebres múltiples o fiebres en el segundo trimestre.
Los expertos dicen que esto sugiere que una infección en la madre puede ser la causante de este mal que cada día afecta a más niños alrededor del mundo, pero también confirman que es demasiado pronto para saber con seguridad.
El estudio de la Universidad de Columbia da más crédito a una teoría de que los agentes infecciosos conducen a respuestas inmunes en las mujeres embarazadas, lo que a su vez conduce a problemas con el desarrollo del cerebro en sus fetos.
Los investigadores dicen que no es la infección inicial, sino la respuesta a la fiebre que afecta el desarrollo del cerebro, posiblemente a través de moléculas creadas por el sistema inmunológico de la mujer, las cuales ingresan en el sistema neurológico del feto. Curiosamente, el estudio no encontró casos de autismo entre los hijos de madres que tomaron ibuprofeno o paracetamol para sus fiebres durante el embarazo.
Sin embargo, hubo muy pocas mujeres en el estudio que informaron haber tomado estas medicinas, para que los investigadores se atrevan a decir algo seguro. Lo que sí aceptan es que este un avance grande en el estudio del autismo y ayudaría a quitar el miedo de algunos padres de vacunar a sus hijos, porque podrían hacerse autistas.
Ahora se busca seguir esta línea de investigación para que las mujeres puedan tomar algún medicamento para controlar la fiebre en el embarazo y si el número de niños que nacen con el padecimiento baja, significa que entonces sí existe una relación.