Si durante tu embarazo la mayoría de tus antojos son dulces, lo mejor que puedes hacer es tratar de moderarlos, ya que el azúcar provoca que los bebés nazcan con propensión a padecer una o más alergias e incluso asma.
Las mujeres que toman demasiado azúcar durante el embarazo duplican la probabilidad de que su hijo desarrolle asma. El estudio, que incluyó a casi 9 mil parejas de madres y niños, utilizó datos de un estudio de cohorte de nacimiento líder en el mundo: el Estudio Longitudinal de Padres e Hijos Avon (ALSPAC), también conocido como “Niños de los 90”. La investigación analizó las asociaciones entre la ingesta materna de azúcares libres en el embarazo y las alergias y el asma a los 7 años de edad.
Aunque sólo hubo pruebas débiles de un vínculo entre la ingesta de azúcar libre en el embarazo y el asma en general, hubo fuertes asociaciones positivas con alergias y asma alérgica. El investigador principal del estudio, el profesor Seif Shaheen, dijo: “Dado el consumo extremadamente alto de azúcar en Occidente, ciertamente estaremos investigando esta hipótesis con cierta urgencia”.
El equipo pensó que el vínculo del azúcar con el asma puede ser explicado por la alta ingesta de fructosa, ya que ésta desencadena una respuesta inmune que conduce a la inflamación en los pulmones en desarrollo. Los científicos controlaron numerosos factores en sus análisis, tales como las características maternas de fondo, los factores sociales y otros aspectos de la dieta materna, incluidos los alimentos y nutrimentos que han sido previamente vinculados al asma infantil y la alergia.
Más importante aún, la ingesta de azúcar libre de la descendencia en la primera infancia se encontró que no tiene ninguna asociación con los resultados observados en el análisis. Dado que el estudio es observacional, no prueba una relación causal entre la ingesta materna de azúcar y las alergias o el asma. Un ensayo controlado aleatorio será necesario para probar definitivamente la causalidad.