Es una pregunta que la mayoría de las madres primerizas tienen: ¿Por qué los recién nacidos tienen hipo casi todo el tiempo? Incluso muchos de ellos, lo tienen desde que están en el útero. Pero, ¿es normal?
La realidad es que sí. Y es de lo más común. De hecho, mientras estabas embarazada, ¿alguna vez sentiste como si tuvieras palpitaciones a un ritmo constante? Probablemente fue tu hijo con un poco de hipo, ya que este fenómeno comienza alrededor del segundo trimestre de la gestación.
El sonido de hipo que oyes es en realidad un espasmo del diafragma. En los recién nacidos, normalmente son causados por un estómago lleno, ya que como tiene poco que abandonaron el vientre y comienzan a aprender a alimentarse, tienden a tomar demasiado aire mientras comen, también puede pasar por un cambio repentino en la temperatura o es simplemente su cuerpo acostumbrándose a la respiración en el ambiente.
Dado que los recién nacidos son tan pequeños, no se necesita mucho para llenar su estómago. De hecho, el hipo es hasta una buena señal en los bebés, ya que muchas veces significa que están bien alimentados.
¿Qué debes hacer si tu recién nacido tiene mucho hipo? En primer lugar: relájate. No es dañino para el bebé. Sólo si ves que llega a ser muy agresivo o que el bebé se ve demasiado incómodo, es conveniente que le des una llamada a su pediatra. Tampoco intentes darle algunos de los remedios comunes que como adultos usamos cuando tenemos esta molestia; en los bebés podrían ser perjudiciales. Y finalmente, no lo confundas con el momento de eructar después de la toma de leche, así que si tiene un episodio de hipo, sólo espera a que se le pase y no le des palmadas en la espalda tan duras.