Los niños de familias monoparentales o de madres solteras tienen un crecimiento tan sano y normal como los de familias biparentales, según una nueva investigación.
No hubo diferencias significativas en el bienestar de los niños y el comportamiento o el estrés de los padres entre estos dos tipos de familia, reportaron investigadores en la Centro Universitario Médico en Amsterdam.
El estudio examinó a 69 madres solteras por elección y 59 madres de familias heterosexuales de dos padres con hijos entre los 18 meses y los 6 años y se encontró que las madres solteras por elección tenían una mayor red de apoyo social de la familia, amigos, vecinos y otros. Por lo cual, la crianza de sus hijos sí recibía suficiente atención.
“Los niños en ambos tipos de familia se desarrollan de manera correcta en términos de su bienestar”, dijo la investigadora Mathilde Brewaeys. “Las madres solteras por elección y sus hijos se benefician de una buena red de apoyo social, y esto debe enfatizarse en el asesoramiento de mujeres que quieren tener y criar a un niño sin pareja”.
Los nuevos resultados del estudio, presentados el miércoles en Ginebra, refutan otras investigaciones de que crecer en una familia sin padre no es bueno para los niños.
Estos estudios “se basan principalmente en la investigación de niños cuyos padres están divorciados y que por lo tanto han experimentado conflictos parentales”, explicó Brewaeys. “Sin embargo, parece probable que cualquier influencia negativa en el desarrollo del niño depende más de una relación conflictiva entre padres e hijos y no de la ausencia de un padre”, agregó la investigadora.
“Así que mientras exista el apoyo de otras personas que puedan ayudar a la madre soltera, el niño estará bien y de hecho mejor que si estuviera en una relación donde viera violencia contra su mamá. Por lo cual las mamás solteras no tienen porque temer que su hijo se desarrolle menos o pierda oportunidades”, concluyó la científica.