Cuando el calor del verano llega y con él las vacaciones, se convierte en un deber diario para las mamás encontrar actividades que mantengan a los niños frescos. Usar la típica manguera, ir a parques acuáticos o utilizar albercas inflables son algunas de las opciones para que tus hijos no sientan tan duro el calor, pero, ¿son estas piscinas inflables seguras para los bebés?
“Las albercas inflables, al igual que otras piscinas en el suelo o de exposición al agua, pueden presentar un peligro para los bebés y los niños pequeños, en particular los menores de 5 años de edad”, dice Eboni Hollier, Pediatra de desarrollo y conducta en Texas: “Los bebés pueden ahogarse en tan sólo unos cuantos centímetros de agua, por lo que las piscinas inflables pueden ser especialmente peligrosas para bebés y niños pequeños”.
Hollier explica que las albercas inflables representan un riesgo particular porque los padres a menudo las perciben como una opción segura, pero ese no es el caso: “cometen el error de colocar piscinas en áreas no valladas o incluso la dejan sin vigilancia porque creen que es muy segura para sus hijos”.
“Ciertamente los niños menores de 5 años requieren supervisión constante de adultos, ya que los niños de este grupo de edad tienen más probabilidades de tener lesiones relacionadas con el ahogamiento o incluso la muerte cuando usan una piscina inflable”, dice Hollier.
Hollier asevera que además de mantener los ojos en tu hijo en todo momento, los padres deben mantener a los niños dentro de un perímetro de longitud. También deben considerar el aprendizaje de CPR (Respiración de boca a boca) y mantener un teléfono celular cerca para llamar a emergencias si es necesario. Una piscina inflable se debe drenar cuando no está en uso y los juguetes se deben sacar para evitar el interés de un niño en ir a buscarlos.
“Un niño nunca debe dejarse desatendido en una piscina inflable, ni siquiera por un segundo”, concluyó.