Los esteroides, que antes solo eran un problema entre los atletas de élite, ahora han llegado al mundo de la buena forma física, afectando a los adolescentes, quienes incluso ahora los toman en un intento de “aumentar” su masa muscular rápido, advierte el gurú de la aptitud Karl Henry.
Al escribir en el periódico Irish Independent, el profesional de la salud, dijo que el aumento masivo de las incautaciones por parte de los oficiales de aduanas de los Ingresos muestra cuán grande, el consumo ha llegado a ser: En 2014, se incautaron 16 mil unidades de esteroides, aumentando a 40 mil en 2015 y el año pasado, se incautaron 109 mil unidades masivas.
“Incluso los jóvenes adolescentes pueden recoger estas drogas ilegales con relativa facilidad, ya sea en línea y a través de distribuidores que son omnipresentes en gimnasios en casi todo el mundo. El problema principal es que en un mercado no regulado, nadie sabe realmente qué es lo que está tomando”, escribe Henry.
“Luego llegamos a la parte más aterradora: los efectos secundarios. Hay muchos llamados entre la comunidad que usa esteroides para regular la industria, pero no importa cuánto lo estén intentado, no pude encontrar ningún organismo que respalde el uso de esteroides”.
Esto es todavía más grave para los jóvenes, cuyos cuerpos aún están en desarrollo y crecimiento, ya que el uso de estas sustancias podría ocasionarles problemas de crecimiento normal u otros padecimientos de salud graves, que podrían llegar hasta infartos tempranos o derrames cerebrales, además de intoxicaciones al realmente no consumir productos que sean de buena calidad.
Lo que Henry recomienda en vez de recurrir a esteroides u otras cosas que te hagan ganar rápido masa muscular es “la constancia, buena alimentación y descanso. En sí esas son las tres cosas que te ayudarán a mantener un buen cuerpo. Para los jóvenes es difícil, porque están en la etapa donde quieren verse bien y quizá tener una pareja, pero no deben olvidar que sus cuerpos no han terminado de desarrollarse y meter sustancias desconocidas a sus organismos, sólo detendrán este desarrollo natural”.