De acuerdo con la red Stanford Children’s Health, la coloración de tu bebé al nacer puede variar según factores como origen étnico, temperatura y si está llorando o no. Cuando un bebé nace, su piel será de color rojo oscuro a púrpura, lo que se aligera cuando comienzan a respirar aire y al pasar el primer día. Pero si las manos y los pies de tu pequeño permanecen morados durante más tiempo: tranquila: se debe simplemente a la circulación sanguínea inmadura.
La Dra. Deane Waldman, autora de la serie de libros electrónicos: Restoring Care to American Healthcare, explica que hay tres causas de una decoloración azulada-púrpura en los recién nacidos, todo lo que tiene que ver con el oxígeno: “Puede tener oxígeno normal en la sangre arterial, pero ralentiza la sangre venosa (normalmente azul) en la piel para que el bebé luzca azul púrpura, pero todos los órganos internos obtienen oxígeno adecuado”.
En la mayoría de los casos, los recién nacidos morados no preocupan en lo más mínimo a los médicos.
Desafortunadamente, hay excepciones. Las otras dos causas posibles que aborda Waldman son más serias. Ella dice que un bebé puede ser morado o azul debido al bajo nivel de oxígeno en la sangre por un problema de pulmón, cuyo sonido es suficiente para hacer que un padre se desmaye por miedo, pero Waldman dice que varios de estos problemas pulmonares son temporales.
La causa más grave de preocupación, y la que más temen los padres, es la posibilidad de que haya poco oxígeno en la sangre debido a un problema congénito del corazón, dice Waldman.
Dirigiéndose a estas preocupaciones específicas, la experta en embarazo de alto riesgo Sasha Davidson, dice que hay varios tipos de enfermedades del corazón que podrían contribuir a un color morado en el nacimiento: defectos estructurales del corazón, ventilación y perfusión, disminución del intercambio de oxígeno, taquipnea pulmonar transitoria y otros cambios cardio-pulmonares del recién nacido.
Entonces, ¿cómo saber cuándo preocuparse? Para comenzar, toma las indicaciones de tu médico; es probable que veas muchos bebés sanos nacidos morados todos los días. Pero la abogada de negligencia médica Annamarie Bondi-Stoddard aconseja a los padres que estén completamente informados sobre el nacimiento de su bebé: “El color purpúreo de los bebés se vuelve rosado cuando la sangre circula. Si el bebé aparece azul, podrían ser signos de privación de oxígeno. Otros signos para buscar pueden ser llanto ausente o débil, corazón de baja frecuencia, debilidad o falta de respuesta a la estimulación. En este caso, el bebé puede necesitar oxígeno y otros tipos de reanimación”.
Si tu bebé nace morado, lo más probable es que esté perfectamente bien. Si bien es importante ser educados en otros signos para buscar por si acaso, el cuerpo de tu pequeño probablemente solo esté aprendiendo a adaptarse al mundo exterior. Entonces, ambos pueden respirar con facilidad.