En las regiones de frío del norte en todo el mundo, desde Toronto hasta Siberia, no es raro ver a los padres llevar a sus hijos afuera en temperaturas bajo cero para hacer ejercicio y aire fresco. La Academia Estadounidense de Pediatría (AAP, por sus siglas en inglés), sin embargo, recomienda mantener a tus niños adentro una vez que la sensación térmica llegue a -20 grados centígrados. Aparte de eso, se trata de mantenerse seco, abrigarse y tomar frecuentes descansos de calentamiento.
En Noruega, no es raro ver a las madres dejar a sus bebés afuera en sus cochecitos para dormir la siesta cuando está por debajo de cero (Celsius) afuera, según la BBC. Afirman que los bebés duermen la siesta mejor, más tiempo, y son más felices por ello. No importa cuán frío esté afuera, en su mayor parte, verás a los padres empujando a los bebés en sus carriolas, envueltos, cuando están a menos de cero grados afuera.
De acuerdo con la AAP, el peligro en el clima frío para tu niño depende mucho si sabes cómo embalar adecuadamente a tu bebé. La organización sugirió usar varias capas delgadas, y posiblemente un traje para la nieve. Esto los mantendrá secos y cómodos. Asegúrate de que sus botas sean impermeables y sus guantes también estén aislados.
La clave es que deben estar secos, no sudando y su núcleo debe ser ligeramente más cálido que sus extremidades. Sus dedos no deberían doler o quedar insensibles, y lo mismo ocurre con los dedos de sus pies. Si hace mucho frío, entra cada 20 o 30 minutos para calentar un poco antes de volver a salir.
Sin embargo, la hipotermia y la congelación son reales y peligrosos. La AAP advirtió que si tu hijo está actuando confundido o arrastrando los pies, o si está más descoordinado de lo que es normal, debe ser calentado inmediatamente y atendid por un médico. Esos son los signos de la hipotermia. Es aterrador, pero si eres prudente es muy poco probable que suceda.
Cuando la hipotermia parece afectar el interior, la congelación ataca el exterior. Es la congelación de las capas externas de la piel afectadas por el frío y puede ser muy peligrosa. Si las manos o pies se blanquean, hay partes que se ven como rojo brillante, tu hijo está entumecido o doloroso, estos son algunos de los síntomas de la congelación, de acuerdo con la Clínica Mayo. La piel puede verse cerosa o con ampollas al calentarse. La congelación ocurre con mayor frecuencia en las extremidades y en la piel expuesta, y puede suceder rápidamente, así que sólo ten mucho cuidado.