Los viajes en carro con niños pequeños no siempre son las experiencias más tranquilas. Entre que piden comida, derraman agua y el incesante: “¿Ya llegamos?” No hay mucho tiempo para relajarse y disfrutar del viaje. Pero si tu bebé se marea en el coche, los paseos en automóvil pueden ser aún más desconcertantes. Por eso hoy te explicamos cómo curar la cinetosis en los niños pequeños y, con suerte, obtener paseos más pacíficos en el futuro.
Según la Dra. Emily Pittman, MD, hospitalista pediátrica de Riley Children’s Health, si tu hijo comienza a desarrollar los síntomas de cinetosis, el mejor enfoque es detener la actividad que está causando el problema. “Si ocurre en el automóvil, deténgase tan pronto como sea posible y salgan y caminen. Si se encuentra en un largo viaje en automóvil, es posible que tenga que hacer frecuentes paradas cortas”. A veces, señala, darles a los niños un refrigerio ligero (como galletas) antes de subir al vehículo puede ayudar, ya que los niños con hambre tienden a tener más síntomas de cinetosis.
Si te preguntas por qué se produce el mareo, la causa se debe principalmente a un desajuste sensorial experimentado en el cerebro. Cuando los niños se enferman por el movimiento, es porque el cerebro recibe información conflictiva del oído interno, los ojos o los nervios de las extremidades, explica Pittman. “Si un niño está sentado en el asiento de atrás y no mira por la ventana, su oído interno percibirá el movimiento, pero los ojos y nervios sensoriales no. O tal vez el oído interno detecta el movimiento del automóvil, pero su hijo está leyendo un libro y, por eso no ve ningún movimiento”. Este tipo de experiencias sensoriales de provocan sensación de mareo.
La enfermedad del movimiento del niño puede presentarse de varias maneras y los efectos son distintos para diferentes niños. Algunos pueden sentirse mareados o querer acostarse. Otros pueden tener una vaga sensación de náuseas, fatiga o pérdida del apetito.
Por supuesto, dado que los niños pequeños no siempre pueden expresar cómo se sienten, es posible que tengas que analizar un poco sus acciones para descubrir qué pasa. Es posible que veas a tu hijo más inquieto, llore a menudo o bostece con frecuencia, dice Pittman. A medida que los niños crecen, las náuseas y los vómitos pueden ser más frecuentes.
Debido a que la cinetosis es causada principalmente por experiencias sensoriales diferentes, hay algunas otras cosas que puedes hacer para ayudar a aliviar el mareo de tu niño en el automóvil, señala Pittman. “Puede ser útil que el niño mire cosas que están fuera del automóvil”, ya que esto puede ayudar a unir esas entradas sensoriales. Centrar la atención lejos de sentirse mareado al cantar, hablar y escuchar música también puede ayudar. Pittman menciona que algunas familias han tenido éxito con viajes en automóvil durante la siesta o durante la noche, si es posible. “Si el niño está durmiendo, no hay información sensorial conflictiva de los ojos”.
Si harás un viaje y tu hijo ha experimentado un mareo antes y no se alivió con las sugerencias anteriores, es posible que desees hablar con su pediatra para considerar medicamentos u otras opciones. Algunos como Dramamine y Benadryl, están disponibles para niños mayores sin receta médica, pero pregúntale a su pediatra antes de usarlos. “Aunque pueden ayudar, también pueden producir efectos secundarios, como somnolencia, sequedad de boca y nariz, o visión borrosa”, advierte Pittman. Siempre es mejor hablar con el médico antes de administrar cualquier cosa.