Las mujeres que se mantienen en forma antes del embarazo corren un menor riesgo de desarrollar diabetes gestacional, lo que sugiere que hacer ejercicio antes del embarazo podría ayudar a que el embarazo sea mucho más saludable, según un estudio dirigido por la Universidad de Iowa.
Según Mayo Clinic, la diabetes gestacional se desarrolla durante el embarazo (gestación) y, al igual que otros tipos de diabetes, afecta la forma en que las células usan el azúcar (glucosa); por lo tanto, causa niveles altos de azúcar en la sangre que pueden afectar el embarazo de una mujer y la salud del bebé. Puede desarrollarse durante la última mitad del embarazo, pero los investigadores han determinado que las mujeres embarazadas que se mantienen activas en realidad tienen un riesgo 21% menor de desarrollarla que aquellas que llevan estilos de vida sedentarios, según News 18.
El estudio, que fue publicado en la revista Medicine and Science in Sports and Exercise, analizó datos de 1,333 mujeres durante un período de 25 años (1985 a 2011) que se inscribieron en un estudio del Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre denominado Arteria Coronaria Desarrollo de riesgo en adultos jóvenes (CARDIA). Las mujeres completaron siete visitas de estudio en total, informando si quedaron embarazadas o dieron a luz y si desarrollaron diabetes gestacional. También se sometieron a un examen de aptitud física en su primera visita.
El estudio encontró que 164 mujeres desarrollaron diabetes gestacional, por lo que los investigadores determinaron que las mujeres pregestantes con altos niveles de condición física tenían un menor riesgo de desarrollar diabetes gestacional que aquellas con niveles de aptitud física más bajos, informó News 18. Las mujeres que tienen diabetes gestacional también eran más propensas a desarrollar diabetes tipo 2 después de dar a luz, por lo que la investigación sugiere que el ejercicio antes de embarazarte, ayuda a combatir ambas formas de diabetes.
Los científicos no saben qué causa la diabetes gestacional, pero tienen algunas pistas, según la Asociación Estadounidense de Diabetes. Las hormonas de la placenta ayudan al bebé a desarrollarse, pero también pueden dificultar que el cuerpo de la madre use insulina, creando resistencia a ésta, que es lo que puede causar diabetes gestacional.
Si no se trata o se controla mal, la diabetes gestacional puede dañar al bebé de una mujer, según la Asociación Estadounidense de Diabetes. Esto se debe a que el páncreas trabaja horas extras para producir insulina, pero la insulina no reduce los niveles de glucosa en sangre y, aunque no atraviesa la placenta, la glucosa y otros nutrientes sí lo hacen, eso le da al bebé niveles altos de glucosa en sangre y puede hacer que su páncreas produzca insulina adicional. La energía extra se almacena como grasa, creando macrosomía y un recién nacido mucho más grande que el promedio.
También los recién nacidos pueden tener niveles muy bajos de glucosa en sangre, mayor riesgo de problemas respiratorios, de obesidad y adultos con un mayor riesgo de diabetes tipo 2.
Las mujeres interesadas en ponerse más en forma pueden hacerlo participando en al menos 150 minutos de actividad física moderada a vigorosa por semana: 30 minutos por día, cinco días a la semana. Una caminata rápida constituiría una actividad física moderada; trotar se consideraría una actividad física vigorosa, de acuerdo con News 18.
“Si las pacientes femeninas que están considerando embarazarse no cumplían con las pautas de actividad física (como lo describe el American College of Sports Medicine), entonces un médico podría escribir una receta, como un programa de caminata”, dijo Whitaker.
Si quieres quedar embarazada, nunca es mala idea hacer un poco de ejercicio antes.