Aprender a andar en bicicleta es importante para la mayoría de los niños, pero se necesita mucha práctica para dominar esa habilidad. Lo más probable es que tu pequeño quiera comenzar a recorrer la ciudad sobre dos ruedas tan pronto como camina y las bicicletas de equilibrio son una forma de presentarles el arte del equilibrio. Entonces, ¿cuándo puede un niño pequeño comenzar a usar una bicicleta de equilibrio y qué tan bien funcionan?
En su mayor parte, los niños pueden comenzar a usar una bicicleta de equilibrio alrededor de los 18 meses de edad, y todavía pueden ser divertidas para niños de hasta 5 años de edad, según lo observado por Two Wheeling Tots. Otras organizaciones también hacen eco de esta información.
Se recomienda que los niños comiencen a usar una bicicleta de equilibrio alrededor de los 2 años o incluso un poco más jóvenes en el sitio web de First Bike. Como con casi cualquier habilidad nueva, la hora exacta en que tu hijo puede comenzar a usar esta bicicleta dependerá de su desarrollo individual, altura y nivel de habilidad. Pero en su mayor parte, los niños alrededor de la edad de dos años pueden usarlas.
Como una bicicleta sin pedales, la bicicleta de equilibrio puede no tener mucho sentido para los adultos que crecieron con triciclos y ruedas de entrenamiento. Pero estos dispositivos de capacitación están ganando mucha popularidad y atención, y no solo de las empresas que las venden. “Las habilidades de equilibrio y pedaleo provienen de diferentes partes del cerebro, por lo que el niño puede trabajar en una habilidad en aislamiento, especialmente para los niños con retrasos motores”, dijo la Dra. Tara Cancellaro, pediatra del desarrollo, en NBC News.
En teoría, las bicicletas de equilibrio pueden ayudar a los niños a realizar la transición a bicicletas regulares de dos ruedas de forma rápida y eficiente, omitiendo por completo la incómoda etapa de las ruedas de entrenamiento.
¿Y cómo trabajan? Los niños pueden pararse con los dos pies en el suelo en cualquier momento en una bicicleta de equilibrio e idealmente desarrollan la fuerza del equilibrio y del núcleo al deslizarse. Al carecer de bielas o pedales, esta bicicleta es 100% alimentada por el niño. “Montarla les brinda a los niños independencia y la posibilidad de ganar confianza en una bicicleta sin la presión de tener que pedalear o retroceder para frenar”, dijo el padre David Eastin en Care.com. “Tienen más control, ya que pueden tocar el suelo y avanzar a su propia velocidad”.
Si estás lista para comprar una bicicleta de equilibrio para tu hijo, hay algunas cosas que debes tener en cuenta. En primer lugar, hay muchas marcas y estilos de bicicletas disponibles, así que date un poco de tiempo para comprar. Luego, el ajuste también es un gran factor. Al igual que con cualquier bicicleta, es importante asegurarte de que la bicicleta de equilibrio sea del tamaño adecuado para tu hijo, como se explica en Cycling Weekly.
Una bicicleta que es demasiado alta o corta, frustra el objetivo. Si es posible, intenta probar la bicicleta en persona para encontrar el mejor tamaño. Por último, es importante que tu hijo disfrute de esta bicicleta a su propio ritmo. En su mayor parte, los niños no necesitan mucha instrucción, solo tiempo, práctica y aliento positivo.