Una nueva investigación sugiere que más personas morirán a causa de olas de calor extremas en las próximas seis décadas, lo que podría tener un mayor impacto en las mujeres embarazadas.
El nuevo estudio publicado en la revista PLOS Medicine descubrió que las muertes relacionadas con olas de calor aumentarán significativamente para el año 2080 si las personas no pueden adaptarse a las crecientes temperaturas causadas por el cambio climático, según USA Today. En particular, investigadores de la Universidad de Monash en Australia desarrollaron un modelo que estima el número de muertes por calor extremo en 412 comunidades en 20 países durante 49 años, y descubrieron que, en el peor de los casos, las muertes por onda de calor aumentarían 471% en Australia entre 2031 y 2080 en comparación con el período entre 1971 y 2010.
El aumento de muertes comenzaría en las regiones tropicales y subtropicales del mundo antes de llegar a Australia, Europa y Estados Unidos, según el estudio. El principal autor del estudio, Yuming Guo, profesor asociado de la Universidad de Monash, dijo en un comunicado:
“Las olas de calor futuras en particular serán más frecuentes, más intensas y durarán mucho más. Si no podemos encontrar una manera de mitigar el cambio climático (reducir los días de ola de calor) y ayudar a las personas a adaptarse a éstas, habrá un gran aumento de muertes relacionadas con la ola de calor en el futuro, especialmente en los países pobres ubicados alrededor del Ecuador”.
Las personas embarazadas son especialmente vulnerables a los efectos del calor extremo, como sarpullido, deshidratación, calambres por calor, agotamiento por calor e insolación. Y esos efectos relacionados con la ola de calor pueden tener un tremendo impacto negativo en el feto.
El calor extremo, por ejemplo, puede causar contracciones pretérmino o trabajo de parto prematuro, que pueden afectar el crecimiento y desarrollo de tu bebé, según Baby Gaga. También puede aumentar las posibilidades de que tu feto desarrolle un defecto congénito que afecte principalmente la médula espinal y el cerebro, informó Baby Gaga.
Además, las investigaciones de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, encontraron que la exposición a temperaturas extremas, ya sea extrema o extremadamente fría, durante todo el embarazo o segundo y tercer trimestre, puede aumentar el riesgo de que bebés nazcan con bajo peso al nacer. El bajo peso al nacer se refiere a los recién nacidos que pesan menos de 2 kilos.
Durante las olas de calor, las mujeres embarazadas también son más susceptibles a las infecciones, lo que puede provocar fiebre y complicaciones en el embarazo que pueden dañar al feto, según Baby Gaga. Además, los accidentes cerebrovasculares causados por el calor extremo también pueden conducir a abortos involuntarios y muerte materna, informó Baby Gaga.
A medida que las temperaturas continúan aumentando, es importante que las embarazadas se mantengan frescas e hidratadas, especialmente si se encuentran durante la mayor parte, si no todo, del verano. Bebe mucha agua, permanece adentro y cerca de un ventilador o aire acondicionado, y visita a tu médico de inmediato si tienes síntomas de agotamiento por calor o insolación. También reduce la ingesta de cafeína e ingesta de sal.
Y una vez que tengas a tu hijo, enséñale sobre el cambio climático y cómo puede proteger el medio ambiente. Enseñarles a cuidar el medioambiente puede salvarles la vida.