Su nombre real es fontanela, de esta hay seis en la cabeza de un bebé, pero de estas, dos son las principales y las más importantes.
La fontanela es una curvatura entre los huesos del cráneo, estas están unidas por un tejido flexible que protege al cerebro mientras se cierran con el tiempo.
Funciones:
Cuando un bebé nace algunos de los huesos del cráneo o el área facial, no están unidos como los de un adulto, permitiéndole que su cabeza cambie de forma para que atraviese en el parto, con el paso del tiempo se van uniendo y finalmente estos “espacios” o “suturas” permiten una sana osificación.
En el cráneo de un bebé se pueden ubicar dos fontaneras, en la parte superior y posterior de la cabeza y a sus lados, que al igual que los otros huesos se endurecen con el tiempo.
Fontanelas:
- La fontanela posterior, está ubicada en la parte trasera de la cabeza y se cierra cuando le bebé tiene uno o dos meses de edad.
- La fontanela anterior, se encuentra arriba de la cabeza y se cierra entre los 7 y los 19 meses de edad.
Características:
Suelen estar abultadas o hundidas, ya que el bebé “provoca” estas características físicas al llorar o pujar, pero no es normal que permanezcan así todo el tiempo.
Normalmente deben sentirse firmes y ligeramente curvadas al tacto, sin embargo, si permanece hundida todo el tiempo debe consultar a su médico o confirmar que el bebé esté bien hidratado y nutrido.
En ocasiones la fontanela comienza “latir”, pero es un mito que esta se pueda caer, como generalmente se cree.
Consultar al médico:
En el caso de que todo el tiempo permanezca hundida, debe acudir al médico, ya que esta característica no es normal.
Así mismo, si el bebé recibe un golpe fuerte en la cabeza, debe acudir al médico inmediatamente.
Nota:
El proceso de maduración de las fontanelas debe ser natural, nunca inducido.