Aunque todas las autoridades han pedido el uso de cubrebocas para esta época, y como una medida para frenar el contagios de COVID-19, su uso desde el inicio fue de polémica, ya que algunos padres desconocen hasta ahora si sus hijos deben usar cubrebocas.
Hace unos días la Academia de Pediatría y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades en Estados Unidos, confirmaron que los pequeños menores de dos años y bebés, no deben usar estas mascarillas, ya que corren el riesgo de asfixiarse.
De acuerdo a la Asociación de Japón, los cubrebocas o mascarillas son peligrosas para los más pequeños, pues dificulta su respiración y en ocasiones no son capaces de retirarlas de su cara.
Las recomendaciones, señalan que los niños menos de dos años o bebés, deberán permanecer en casa en caso de tener la necesidad de salir, cubrir el portabebés o la carriola con una manta delgada, que proteja a los infantes y no obstaculicé su respiración.
Esta medida solo aplica con niños menores de dos años, para el resto de las edades, aplica solo cuando están fuera de sus hogares y es necesario. También deberá usarse en caso de que alguno de sus familiares sea portador del virus, padezca de una enfermedad crónica o tenga un sistema inmunológico que afecte su salud en estos tiempos.
Además el uso de cubrebocas debe estar supervisada por un adulto, así mismo, aplica en caso de requerir uno especial como N95.
La nueva normalidad es seguir protegiendo a quienes más queremos y debido a eso, debemos enseñarles a nuestros hijos a cuidarse y con ello, practicar en casa, para que el día de mañana sepan usar un cubrebocas de manera correcta y respetar la sana distancia que desde hace unos meses es la más recomendada.