Nuevo estudio sugiere que gracias a las células madre y una operación durante el embarazo ayudará a tratar la espina bífida del bebé.
Esta afección congénita afecta directamente la columna vertebral cuando no se desarrolla bien, actualmente se puede detectar en el embarazo y existen métodos para tratarla desde su detección y de esta forma minimizar daños neurológicos en los niños.
Un ensayo clínico realizado por la Universidad UC Davis Health de California (Estados Unidos) que involucra células madre combinado con cirugía fetal y terapia celular podría dar mejores resultados que la pura cirugía fetal.
Se trata del ‘Ensayo de Cura: Terapia Celular para Reparación de Mielomeningocele en Útero‘ el cual consiste en un procedimiento quirúrgico el cual combina el uso de un ‘parche’ único de células madre que repara el defecto mientras el bebé se encuentra en el útero materno.
De acuerdo al equipo clínico liderado por Shinjiro Hirose, se pretende tratar a seis mujeres, a quienes se les pondrá un soporte biológico de células madre mesenquimales de placenta, directamente sobre la médula ósea. Posteriormente el cirujano cerrará la apertura en la espalda del bebé para permitir que el tejido se regenere y proteja la médula ósea.
“Actualmente el tratamiento estándar para nuestros pacientes es la cirugía fetal que, si bien es prometedora, todavía deja a más de la mitad de los niños con espina bífida sin poder caminar de manera autónoma”, señaló Diana Farmer, profesora y jefa de cirugía en UC Davis Health e investigadora principal en el estudio.
Para este estudio, el equipo médico ha preparando este importante ensayo clínico por muchos años. Ya han generado las células madre de tejidos de la placenta, mismas que son consideradas las más prometedoras en la medicina regenerativa.
Por su parte Jan Nolta, directora del Programa de Células Madre de UC Davis, añadió que estas “células madre mesenquimales generalmente las llamamos los ‘paramédicos’ del cuerpo porque producen factores curativos”.
Además el ingeniero biomédico de células madre Ahijuna Wang y codirector del laboratorio quirúrgico de ingeniería biomédica de UC Davis, ve con buenos ojos poder reparar en forma segura la espina bífida, conocida como mielomeningocele (MMC).
“Nuestro enfoque de terapia celular, en combinación con la cirugía, debería promover la regeneración de tejidos y ayudar a los pacientes a evitar impedimentos devastadores durante toda su vida”.
Diana Farmer, autora del ensayo clínico, ha trabajado más de una década en este estudio. Lo último es comprobar si funciona en bebés, tras ser aprobado su uso en humanos por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA- EE.UU).
Finalmente se dio a conocer que las participantes en el ensayo clínico se controlarán por un equipo de investigación por 30 meses y después de su nacimiento para evaluar la seguridad y eficacia del procedimiento quirúrgico de células madre.